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Estos son los comentarios que ha envíado Mabel Flor
#1 Entretenida, sin más. Un argumento simplón: una mansión en medio de la nada, expropiación de tierras, o un asesinato por resolver, son las tramas principales.
Casi puede extraerse algún aprendizaje más rollo psicológico que otra cosa.
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La novela, como decía, trata del apego a las tierras, a los orígenes, a la herencia familiar, mezclado con la investigación de un asesinato que ocurre en la casa que nos ocupa.
Lo interesante es el personaje de la protagonista a nivel psicológico. Una mujer entre los 45-50 años, excesivamente apegada a la herencia de su familia sin, creo, desearlo.
El apego a ¿qué? es tal, que le impide avanzar en la vida a pesar del dolor que la provoca, especialmente cuando ve cómo su entorno (hermano, amigas) sí han avanzado, a algo mejor o a algo peor, pero avanzan, y ella, por ¿cobardía?, por ¿miedo?, o por alguna otra razón que no se llega a entender, está estancada en el pasado, un pasado que ni siquiera ella quiere.
Al final, la escritora la hace avanzar, al menos…
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El único aprendizaje que se puede extraer es: “Es necesario avanzar en la vida. Dejar atrás lo que no se quiere y buscar lo que sí se quiere”.
Tiene ciertas reminiscencias a “Rebeca”, de Daphne du Maurier, pero lejos del carácter psicológico y la trama de asesinato del original.
#1 Una historia entretenida; una imitación pero literaria y a la española de “Los amigos de Peter”.
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La historia narra el encuentro de un grupo de amigos, 6 exactamente, que se conocieron en la Escuela de Bellas Artes, y, aunque mantienen el contacto, unos por unas cosas y otros por otras, hace que lleven sin verse más de 10 años. Un día, uno de ellos, invita al grupo a pasar un fin de semana en su hotel de la Provenza porque hay una noticia que quiere compartir con ellos.
A pesar de alguna reticencia por alguno de ellos, finalmente todos acuden a la invitación y transcurre el fin de semana rescatando viejos tiempos, tratando de recuperar aquello que les unió pero el paso del tiempo y los derroteros de la vida de cada uno se encargó de llevarse; para aclarar malentendidos que se dan en todas las relaciones pero no somos capaces de resolver en el momento en que ocurren; y ponerse al día de cosas que les han ido ocurriendo y no las han contado por ¿vergüenza? ¿porque “soñaban” con una vida que nunca llegó a materializarse y cómo vamos a exponernos así ante los demás?
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Sin duda, el paso del tiempo afecta a las personas con las que nos rodeamos. La vida hace que vayamos dejando atrás algunas amistades y cogiendo nuevas y más afines al momento personal en que estamos viviendo. ¿Es eso negativo? ¿Es necesario forzar la máquina y reencontrarnos con los que compartimos escuela, universidad, trabajos anteriores 10-20 años atrás?
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Pues yo creo que depende del momento vital nuestro y el de ellos. Si no es el mismo, rara vez se recuperaría el tiempo ausente. “Lo semejante atrae a lo semejante”, en las relaciones, también…
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De esto va el libro, de volver atrás en el tiempo como si cualquier tiempo pasado fuera mejor. A los nostálgicos os gustará.
#1 “Amor” en sentido literal.
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Más allá de la sinopsis que podréis encontrar en la propia contraportada del libro, un encuentro imprevisto en la Gran Vía que lleva a reunir 20 años después de su historia juvenil de amor a Constanza (en la actualidad abogada de prestigio) y a Mauro (actualmente sacerdote que regresa de Roma a Madrid llamado por el arzobispado de Madrid), es una historia de amor detenida en el tiempo por lo propio de la juventud, esa etapa de incertidumbre de no saber bien hacia donde ir, y se avanza sin tener en cuenta lo que se deja detrás (en esa etapa no se tienen en cuenta esas cosas).
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Sin embargo, la vida da oportunidades para acabar lo inacabado, y aquí es donde empieza el reencuentro de los protagonistas interponiéndose lo que les ha ocurrido en esos 20 años (compromiso, matrimonio, dolor, desamor, tristeza) a partes iguales para los dos, y tendrán que decidir si permitirse volver a vivir, a pesar de sus contradicciones, luchas internas, moral, etc., o mantenerse fiel a su mundo actual.
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¿Lo hicieron?
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Novela muy agradable de leer, con una narración muy ágil, con todos los ingredientes propios del género, amor, despecho, casualidades, dilemas morales, encuentros furtivos, besos prohibidos, final ¿feliz?
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Altamente recomendable. Aunque, cuidado…, peligrosa para las nostálgicas del primer amor…
#1 ¡Qué gran descubrimiento!
Novela aparentemente autográfica cuya narración comienza la noche de la ceremonia en el que se falla el Premio Planeta 2014, y Pilar Eyre como firme candidata para llevarse el galardón con una novela también autobiográfica “Mi color favorito es verte” en la que cuenta su apasionada aventura con un señor francés que conoce una noche de verano en la Costa Brava, pero que la deja muy marcada, tanto que no cesa en su empeño de volver a encontrarse con él.
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“Nomeolvides” sería la continuación de “Mi color favorito es verte” en donde asistimos desde cómo se arregla para asistir a la ceremonia del galardón (retoque estético incluido), cómo se siente el quedarse finalista, la promoción comercial posterior, la relación con la gente que la rodea, y el nexo a todo ello, la obsesión por volver a ver a ese hombre de aquella noche de verano.
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Una novela divertidísima desde el mismo comienzo. Por favor Pilar, cierra con cualquier publicación semanal tus vivencias para tener las risas aseguradas todas las semanas…
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Sin embargo, al mismo tiempo, una historia, que, de ser cierta, sería demasiado sincera. Se abre en canal al lector. Descubrimos cómo piensa, políticamente incorrecta muchas veces, su desinhibición para hablar y hacer, pero sobre todo cómo siente, que incluso podría llegar a costar entender esa obsesión por encontrar a ese hombre.
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Y sí, la vida siempre da una segunda oportunidad, que le llega a ella en forma de reencuentro con ese hombre que hasta la lleva a plantearse lo que ha sido su vida hasta ahora.
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Tratad de conseguir este libro ya en las tiendas, e-book, bibliotecas, etc. Merece la pena.
#1 Un libro delicioso.
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La historia transcurre en el Madrid del año 1720, cuando Clara, una joven cocinera entra a trabajar como oficial de cocina en el casa del marqués de Castamar, don Diego de Castamar, sumido en una vida gris desde que perdió a su esposa en un desafortunado accidente con un caballo.
A los pocos días y debido a un desliz de la cocinera jefe, Clara tiene que hacerse cargo de la preparación de los menús a degustar con motivo de las celebraciones de aniversario que tienen lugar en el ducado de Castamar.
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El éxito de su cocina es tal que, se convierte en la cocinera jefe, y a partir de aquí empieza la trama entre los personajes, por un lado de la aristocracia propia de la época, y por otro de la servidumbre. Se entrecruzan las intrigas palaciegas, envidias, secretos, traiciones, casamientos por interés, etc., todo ello en una historia muy simple, pero muy bien escrita y muy agradable de leer.
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Es como un gran relato que transporta a la época con el ambiente que describe de la corte, de la aristocracia, de la servidumbre hacia sus señores, de la sociedad del qué dirán, de las dotes por casamientos… Todo muy dieciochesco, muy delicado, con mucho amor y nobleza.